Partes de la flor y sus funciones

La flor es la decoración de la naturaleza en el mundo. La flor engalana todas las actividades del ser humano. Sin flores el mundo sería un terreno árido con estrellas opacas en el firmamento.

La flor es inspiración de parejas, letra de canciones, versos de poetas, adorno sin igual de hogares, parques y jardines, olor de fragancias, descanso, relax.

No sólo como ornamento, sino por sus propiedades medicinales, culinarias o en infusiones, las flores también sirven para aliviar los dolores, saciar el hambre o como té relajante.

Y más allá de todo eso, la función de las flores en la naturaleza es la de servir como órgano reproductivo de las espermatofitas, y su función principal es la de producir semillas para asegurar la propagación de las plantas.

Las espermatofitas están divididas en dos grandes grupos: gimnospermas y angiospermas.

Gimnospermas 

Son arbustos o árboles de aspecto leñoso, sin raíces; de hojas coriáceas, aplanadas, que se renuevan constantemente (follaje perenne).

Gimnos es un prefijo griego que se refiere a lo desnudo y desprotegido de estas plantas, cuyos órganos reproductores vegetales y sus semillas carecen de envolturas florales que los protejan.

Son plantas monoicas o dioicas, que cuentan con solo unas 800 especies distintas, cuyas flores son unisexuales, carentes de perianto; las flores masculinas están formadas por un determinado número de estambres con sacos polínicos en su parte inferior.

La germinación se produce cuando las partículas de polen son llevadas por la brisa hasta los óvulos de las flores femeninas, y es entonces cuando los espermatozoides o células espermáticas inmóviles fecundar al gameto femenino (oosferas); su reproducción es mucho más lenta que las de las angiospermas.

Las angiospermas 

Son las que dominan la flora del mundo, porque son las más avanzadas y predominantes de la Tierra, con más de 250.000 especies.

Agrupan desde las plantas pequeñas hasta las más grandes; plantas herbáceas, semileñosas y leñosas; anuales, bianuales, plurianuales y perennes y caducas.

En las angiospermas la polinización es zoófila e indirecta ya que el polen es captado por el estigma.

Pero, ¿de dónde viene tanta belleza y tanta elegancia? ¿Qué tienen las flores, de qué están formadas para ser tan elegantes y fragantes?

¿Cuáles son las partes de una flor?

La flor es el órgano de las angiospermas especializado en la reproducción sexual, formada por cuatro verticilos, como el cáliz, la corola, el androceo o estambres y el gineceo o pistilo, todos ellos insertados en el receptáculo que se encuentra en el extremo del pedicelo que une la flor a la rama.

La estructura de las flores es muy delicada; comienza en el tallo de la planta, desde donde se distribuye a las demás partes. Es importante decir que todas las especies reúnen partes indispensables en su crecimiento, polinización y reproducción.

Ahora, veamos cada una de esas partes:

Pedúnculo

Es el tallo de una hoja fruto o flor por el cual se une al tallo de la planta. Allí se insertan las hojas modificadas de las flores encargadas de su reproducción; es la última parte del tallo que sostiene la flor, la cual se ensancha en su extremo, dando forma al receptáculo.

Receptáculo

Como queda dicho, es un ensanchamiento cuya función es la fijación y sostenimiento de la flor.

Perianto 

Es la envoltura que rodea a los órganos sexuales, las hojas que envuelven y protegen los órganos reproductores de la flor en el proceso de desarrollo. Contiene a los verticilos estériles de la flor, como el cáliz y la corola.

Cáliz

Es el verticilo externo de las flores, una estructura compuesta similar a las hojas verdes, que tiene como función proteger y sostener los pétalos antes de que se abra la flor.

Corola

Es el verticilo interno y se compone de pétalos vistosos y coloridos; su función es atraer a los insectos que ayudan en la polinización. Tiene forma de embudo, dilatado en la parte superior y estrecho y largo en el resto.

Carpelo

Es la parte reproductiva femenina de la flor. Su conjunto crea el gineceo; el carpelo está formado por el estilo, el estigma y los ovarios que conforman el pistilo.

Pistilo

Es cada unidad del órgano femenino, que contiene los ovarios, estilo y estigma y constituye un carpelo.

El ovario

Está en la zona inferior del pistilo, y contiene los óvulos a ser fecundados por el polen masculino.

El estilo 

Es una estructura cilíndrica y tubular donde se guarda y conduce el polen; es una especie de rabillo que conecta el estigma con el ovario.

El estigma 

Viene siendo la parte superior del pistilo, y se encarga de elaborar el néctar del polen.

Gineceo 

Es el aparato reproductor femenino de la flor donde están los pistilos. Se trata de carpelos unidos o separados a través de un pistilo; sobre ellos se producen los óvulos que tienen los gametos femeninos.

Estambre (Androceo). 

Es la parte masculina de la flor que produce el polen; contiene el filamento y la antera.

Los pétalos 

Los pétalos de la flor son los que atraen las miradas admiradas de las personas yde los insectos polinizadores, y varían según el tipo de flor y sus colores.

¿Cómo se reproducen las plantas con flores?

La reproducción de las flores se produce mediante el proceso de polinización, consistente en la transferencia del polen de una flor a otra.

En ese proceso, el ovario de la planta recibe el polen y se convierte en semilla, a través de insectos, como las abejas que acuden atraídas por el brillo y el perfume de las flores.

Cuando la abeja se acerca a la flor para absorber el néctar, el polen se queda adherido a sus patas, y cuando la abeja se acerca a otra flor, el estigma pegajoso de esta atrapa el polen; así, va polinizando las flores una a una.

Otra forma de polinización es el viento, pues hay flores que transportan de esa forma el polen producido por los estambres.

Los estambres producen gran cantidad de polen y, como este es ligero, viaja a hombros del viento por los bosques hasta polinizar otras flores pequeñas y no muy coloridas, cuyos estigmas son pegajosos y cuelgan fuera de la flor para atrapar el polen.

Todo este proceso maravilloso lo desarrolla la naturaleza para crear el fastuoso mundo de las flores, sin el cual, como hemos indicado antes, el mundo sería muy opaco y triste.

Por eso, cada vez que veamos una flor debemos regocijarnos de tenerla en nuestro entorno porque en ellas está impresa la huella de Dios, sin duda alguna.

Fuentes y bibliografía

 

Autor: Roberto Espinosa.https://www.sembrar100.com/huerto/

 

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